Esta entrada en realidad nada tiene que ver con videojuegos, pero es algo que me inquieta desde hace tiempo y simplemente tenía ganas de compartirlo.
Todas las computadoras que poseen un reloj interno son capaces de generar números al azar. Tienen una función Random, que varía entre lenguaje y lenguaje (de computación), que devuelve un número verdaderamente azaroso. Ese número lo generan con alguna compleja función que usa como dato de entrada algún número obtenido del reloj del sistema en ese momento. Este dato de entrada también es llamado seed, o semilla.
En cualquier reproductor mp3 el modo shuffle simplemente arma una lista de canciones al azar con todas las canciones que tiene en su memoria. Con el iPod esto no parece ser tan así. No caben dudas que hay mucha atención puesta en el diseño del software del reproductor de música más vendido del mundo, el iPod. Yo tengo un solo modelo: el nano primera generación. Mi sensación desde que lo uso es que de alguna manera adivina lo que quiero hacer. Algunas pruebas de esto son, que si saco los auriculares se pone en pausa, la integración con iTunes, el armado de listas inteligentes; navegando por sus menúes uno nunca tiene la sensación de que tiene que volver a empezar o algo así, es como natural, uno va, viene, elige, sube, selecciona y siempre está donde espera estar.
Parece ser que también hay mucho ímpetu puesto en el algoritmo de selección de canciones en el modo shuffle. La sensación que tengo es que el iPod tiene un algoritmo para tratar de elegir, dentro de un azar algo mentiroso, las canciones que el usuario quiere escuchar. Trata de adivinar en base a lo los gustos musicales, canciones similares para que resulte agradable el modo Shuffle. Si una canción es adelantada sin escucharse, las canciones mismo disco o del mismo autor tendrán menos probabilidad de salir, y los autores y discos de las canciones escuchadas por completo tendrán más probabilidad de escucharse. Y las canciones más escuchadas tendrán más probabilidad de volver a ser elegidas en una siguiente selección del modo shuffle. Y el genero de las canciones que «gustan» incrementa también la probabilidad de las siguientes elecciones.
iPod nano display
Esto es sólo una sensación que me apareció después de haber usado el iPod por aproximadamente tres años, tal vez es sólo una sensación, pero no me lo quería guardar. Lo interesante es que desde hace bastante tiempo sólo uso el modo Shuffle de mi iPod nano…
Yo diría que Steve Jobs no deja nada librado al azar! ni siquiera el modo shuffle de sus players digitales